Hoy he estado leyendo algunos artículos de tecnología que tenía pendientes, leyendo ponencias, papers, noticias y proyectos de otra gente. Como dirías tú, me he ido a dar una vuelta por “the edge” y me he dado cuenta de que había estado mucho tiempo lejos, demasiado.
Agilizando que es gerundio
Hubo un día en el que me levanté y vi que no era ágil.
Las legañas pegadas a mis párpados me nublaban la visión. Mis agorratadas piernas no alcanzaban a erguirme. Los músculos entumecidos no movían mi esqueleto. Vagaba disperso en mil asuntos distintos y no resolvía ninguno. Ingentes cantidades de tiempo se perdían en la puesta al día de los pequeños avances que en cien mil frentes se hacían. Las reuniones se alargaban. La habilidad de uno se volvía el perjuicio de muchos, cuando uno no era capaz de explicarse correctamente. Los cuellos de botella aparecían a pares.
Hay que ser ágil my friend.
Dictadura Fallera
Si te opones eres radical, antifallero y por ende antivalenciano y quien sabe si procatalanista y todo esto gracias a una bula legal.
¿Qué sentido tiene que una falla queme todos los años las persianas y los carteles de los comercios y las fincas que tienen la suerte de estar alrededor del monumento? ¿Qué sentido tiene autoexculparse en nombre de la fiesta? ¿Qué sentido tiene confiar en un seguro que de año a año todavía no ha reparado las persianas o reparar el luminoso 5 meses tarde?
¿Qué sentido tiene cortar las calles 6 días antes de su comienzo? ¿por qué tienen ese derecho? ¿No les basta despertarnos a las 8 de la mañana durante los días 14, 15, 16, 17, 18 y 19 con la dichosa “despertà”? ¿por qué se sigue multando durante estos días al que aparca en mal estado -aunque no moleste al tráfico ni al peatón- cuando la cantidad de aparcamientos ha disminuido de manera drástica?
¿por qué la fiesta tiene que incluir a los que no la compartimos? Carente por completo de silencio y obligado, ante la inexistencia de plaza de aparcamiento, a utilizar transporte público -léaseme con calma, no vaya alguien a creer haber encontrado la manera de fomentar el uso del transporte público- te ves obligado a unas interminables -y sonoras- esperas al dichoso autobús. El recorrido del cual se vuelve sinuoso y exasperante durante las fiestas.
Por cierto, por si alguien todavía lo dudaba, estos dias estaré fuera y no miraré mucho el correo. A los que os quedáis: sentimientos encontrados, pasarlo bien o pasarlo rápido.
"Lo ético es lo legal"
Abogo a mi derecho a cita para poner aquí ciertas declaraciones que revoletéan mi cabeza desde el 17 de Febrero, día en el que un iluminado esputó:
“Lo ético es lo legal” [1]
Serafín Castellano, Conseller de Gobernación. (dejemos al margen lo chirriante de “Gobernación”) Continue reading “"Lo ético es lo legal"”